lunes, 9 de agosto de 2010

"Darle amistad a quien busca amor, es como darle pan a quien tiene sed" leí una vez, y comprendí todo. Es como dos peluqueros que buscan peinar a la misma persona, uno intenta que tenga rulos y el otro busca el pelo lacio. Nunca van a llegar a nada, el pelo nunca va a tener rulos y jamás va a ser lacio. Pero cada uno se empecina en que quede como él quiere y el pelo se termina desgastando y muere. Ahora lo entiendo, quizá un poco tarde...

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